La plaga

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Nació un 14 de febrero de 1989, desde temprana edad manifestó predilección por la Literatura y la poesía, ha participado destacadamente en concursos de declamación, se formó como docente de Lengua y Literatura en la Universidad Central del Ecuador, escribe de forma aficionada: poesía, relatos cortos y ensayos. Ha sido docente en instituciones públicas y privadas, promoviendo la creación literaria en sus estudiantes.

Plaga

A la mañana siguiente abrió los ojos y esos pequeños defectos que tenía le parecieron magnificados: el rastro de saliva en la almohada, los ronquidos prolongados por horas y esa manía suya de sacar la pierna derecha fuera de la cama, la suma de todo le pareció insoportable, intolerable, detestable y no, no era la exacerbación que producen la monotonía, simplemente el detonante de esa espontánea repulsión. Aquel blanco cuerpo inmaculado había sido corrupto por la sombra tenue de la perfidia.  

Lo contempló dormir pasivamente, teniendo dentro una guerra sin tregua, entre sus ganas de abrazarle y sus ganas de verle muerto… Él abrió los ojos, ella se avergonzó de ser pillada, se levantó en furia, le gritó que se levantara, retiró las sábanas, las puso a lavar. Él todavía atolondrado por los restos de sueño que tenía en el cuerpo, no respondió; ella aplicó sobre el colchón algún aerosol que desinfectaba.

– ¡Qué ofensa! ¡Qué desgracia! Como si yo fuera una plaga, dijo él.

No podía fingir, ni entender que los pecados no se lavan con legía, los pecados se lavan con sangre…

plaga, plaga, plaga,

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La Disputa

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