Conflicto en Afganistán
La realidad actual de Afganistán se encuentra inmersa en total incertidumbre sobre la reacción en el escenario internacional, con un especial énfasis en la protección de los Derechos Humanos principalmente en las mujeres. Ya que, como se ha podido evidenciar en el artículo anterior: Generalidades de la cultura afgana y el Movimiento Talibán, es un objetivo primordial en la agenda del movimiento Talibán. Por otro lado, lo acontecido en estas semanas con la toma de la capital Kabul por parte del movimiento Talibán ha despertado conmoción internacional por las imágenes de miles de civiles, abarrotando la pista del aeropuerto internacional Hamid Karzai, intentando huir del caos y el descontrol.
Considero que adicional a estas amenazas, es primordial entender que el resurgimiento del movimiento Talibán. Era un proceso inminente, partiendo del hecho de que jamás fueron derrotados. Los Talibanes aceptaron el hecho de que la invasión por parte de EEUU y OTAN que buscaba como objetivo principal acabar con Al-Qaeda y Bin Laden. Y que las consecuencias serían un círculo de violencia de eterna duración. A pesar de aquello, han utilizado el conocimiento geográfico y las olas fundamentalistas del Islam para arraigarse mucho más en las raíces de la cultura, como arma principal de resistencia ante toda imposición.
El discurso de tolerancia que mantienen para fomentar el diálogo con la población, tiene un tinte similar a una estrategia de asimilación a largo plazo. En otras palabras, desde una perspectiva externa se puede percibir, que probablemente el plan es intentar arraigarse mucho más en las sociedades locales. De forma lenta y “tolerante” permitiendo que la ideología del movimiento se vaya aceptando poco a poco, fortaleciendo la conexión con las raíces culturales (Maher, 2021).
Parte de este discurso “tolerante” es el declarar una amnistía general, solicitar a los trabajadores que se acerquen a sus sitios de trabajo para que continúen con su labor, pero bajo las reglas de la Ley Islámica (Sharía). De igual manera, proclaman que las mujeres pueden acceder a la educación. Pero usando el Hijab y que los Derechos Humanos serán respetados al igual que la libertad de expresión, siempre y cuando estén alineados con la sharía (Wood, 2021).
Esta nueva imagen que intenta proyectar el movimiento Talibán, tiene una relación directa con evitar los errores del pasado. Algunos analistas sumados a los diferentes medios de comunicación mencionan que podríamos ver a un movimiento“Talibán 2.0”. De alguna forma se podría expresar que uno de los rasgos fundamentales de esta reconquista es mantener una vía de comunicación con el mundo. Por ejemplo, la Comisión Cultural del Talibán mediante un representante oficial, fue una de las primeras entidades en brindar entrevistas a medios internacionales. Acerca de la visión tolerante del movimiento Talibán, anunciando la voluntad de un trabajo conjunto con las fuerzas de EEUU (antes de su salida) para fomentar un espacio de tranquilidad y de seguridad en la población afgana.
Por otro lado, es interesante mencionar el rol del ejército afgano durante todo este tiempo de “entrenamiento y financiación”. En la práctica, existirían dos posibles caminos: ¿Nuevamente el factor cultural podría haber jugado un papel influyente? o ¿El hecho de deshacerse de la presencia extranjera (y todo lo que implique) pesaría más que volver al control social manejado por el movimiento talibán?. De acuerdo a lo que se ha podido apreciar durante estas últimas semanas. Existe mayoritariamente un descontento hacia la reconquista por parte del movimiento Talibán, antes que una aceptación y regocijo.
El ejército afgano después de veinte años de conflicto seguramente percibió desde el inicio de las negociaciones entre los EEUU y la cúpula del movimiento Talibán. Que un aparato de seguridad élite no sería la herencia que dejarían las superpotencias. Esa constante dependencia se convierte en la amarga realidad que ahora viven los afgano. El hecho de siempre esperar a que otros asuman responsabilidades con el objetivo de “enseñar como se hace”. Y el caso no solo se refleja en el fracaso militar de impedir que el movimiento Talibán ocupe el 90% del país y promueva la proclamación de un Emirato Islámico. Sino que la principal autoridad local que lideraba la transición, tome la decisión de abandonar el país.
Por otro lado, no se puede dejar a un lado el hecho de la constante amenaza de los grupos locales afiliados al Estado Islámico (EI). Principalmente el denominado Estado Islámico de la Provincia Khorasan (ISKP o ISIS-K).
El avance del movimiento Talibán en su reconquista de territorio afgano, incluyó la liberación de cientos de personas privadas de libertad. Muchos de ellos simpatizantes del EI que lograron incorporarse nuevamente a ISKP. El resultado fue el ataque perpetrado en las inmediaciones del aeropuerto internacional de Kabul el 26 de Agosto del 2021, utilizando ataques suicidas (suicide bombers). En contra de traductores y colaboradores del ejército norteamericano, pero provocando un mayor número de víctimas en la población civil (Al Jazeera, 2021).
Por el momento, esta debería ser identificada como la principal amenaza frente al vacío de poder que existe en Afganistán. Por más que el movimiento Talibán se encuentre en el proceso de asumir mayoritariamente el control del territorio. La amenaza de los grupos extremistas como las filiales locales del Estado Islámico, estarán presentes mediante constantes ataques terroristas. El vacío del aparato de seguridad ocasionado por la salida de las tropas tanto de la OTAN como de EEUU. Se ha convertido en el punto de inflexión para que el radicalismo islámico encuentre el perfecto caldo de cultivo para su crecimiento.
Desde la visión geopolítica, uno de los principales ganadores de la reconquista Talibán sería su vecino Pakistán. La principal razón fue que el movimiento Talibán tuvo su nacimiento y auge en las fronteras con Pakistán. Mediante la creación de las madrasas para los jóvenes refugiados de la guerra Afgano-Soviética. Un gobierno Talibán sería una victoria para Pakistán, ya que, por un lado, fortalecería su influencia territorial en la región y a su vez, ayudaría a fortalecer a las instituciones y partidos políticos religiosos en ese país con miras hacia un cambio de gobierno de características similares a las de Afganistán (Kaura, 2021).
En el mismo campo de la geopolítica, es inminente que con la retirada de los EEUU. Los gigantes como China o Rusia serían los próximos colosos que ocuparían un papel primordial como principales inversionistas en la reconstrucción del país.
Sin embargo, la traba principal es la misma que mantiene al mundo en vilo: ¿De qué manera el movimiento Talibán asumirá las riendas del país? La posición que adopte al nuevo gobierno será la pieza fundamental para que entre estas potencias, decidan hasta que punto se podría entablar los diferentes tipos de relaciones, tanto en el ámbito comercial, como en el camino hacia una lenta pero anhelada reconstrucción del país (Moritsugu, 2021).
Por otro lado, el mundo se enfrenta nuevamente a una creciente crisis migratoria por parte de una gran cantidad de población civil que decidió abandonar el territorio desde el inicio de la reconquista Talibán. De acuerdo con información expuesta en varios medios internacionales, todavía existen muchos Organismos Internacionales que mantienen personal operativo en el territorio y que se encuentran solicitando formalmente (mediante la interpelación principalmente de países de la Unión Europea), que se facilite la evacuación de afganos que han colaborado con estas instituciones y que temen ser víctimas de represalias por parte del movimiento Talibán (DW, 2021).
Finalmente, queda en duda realmente si la conexión con Al-Qaeda se mantiene completamente activa, mucho más ahora que el grupo talibán se convertiría en la cabeza visible de un Estado. Si de una u otra forma, están evitando implantar su ideología de una forma rápida y violenta, se cuestionaría el hecho de aceptar y apoyar formalmente a una entidad catalogada como grupo terrorista a nivel mundial. Sin embargo, el hecho de que el grupo talibán oficialice el manejo de un Estado, no le impedirá continuar la conexión directa con el mundo del cultivo de opio -como una de las principales fuentes de financiación- y cualquier otro tipo de actividad que involucre mantener activos los ingresos (Gutiérrez, 2021).
Los siguientes meses serán decisivos no solo para Afganistán, sino para todo el mundo. El futuro es un escenario demasiado incierto, mucho más cuando el movimiento Talibán todavía no ejerce el mando político del territorio reconquistado. Debido a las necesidades económicas y sociales urgentes existe una alta probabilidad que la “tolerancia” sea una herramienta práctica al inicio, para obtener el visto bueno de los organismos que proveen la ayuda humanitaria y financiera.
A pesar de aquello, el movimiento Talibán envuelve un alto nivel de misticismo en torno a como se desarrollará su nueva administración y cuales serán los principales ejes de acción, principalmente en los temas de respeto a los DDHH de la población.
El medio de comunicación no se responsabiliza por las opiniones dadas en este artículo.
Bibliografía
Wood, G. (18 de Agosto de 2021). The Atlantic. Recuperado el 20 de Agosto de 2021, de This Is Not the Taliban 2.0: https://www.theatlantic.com/ideas/archive/2021/08/dont-trust-taliban/619790/
Al Jazeera. (27 de Agosto de 2021). News ISIL. Recuperado el 27 de Agosto de 2021, de What we know about Islamic State Khorasan Province: https://www.aljazeera.com/news/2021/8/27/islamic-state-in-khorasan-iskp-aka-isil
DW. (5 de Septiembre de 2021). DW made for minds. Recuperado el 6 de Septiembre de 2021, de Merkel pide dialogar con los talibanes para evacuar más personas de Afganistán: https://www.dw.com/es/merkel-pide-dialogar-con-los-talibanes-para-evacuar-a-m%C3%A1s-personas-de-afganist%C3%A1n/a-59092969
Gutiérrez, Ó. (28 de Agosto de 2021). El País Internacional. Recuperado el 6 de Septiembre de 2021, de No solo de opio viven los talibanes: https://elpais.com/internacional/2021-08-29/no-solo-de-opio-viven-los-talibanes.html
Kaura, V. (24 de Agosto de 2021). Middle East Institute. Recuperado el 30 de Agosto de 2021, de The Taliban and the formation of a new Afghan government: https://www.mei.edu/publications/taliban-and-formation-new-afghan-government
Maher, S. (17 de Agosto de 2021). NewsStatesman. Recuperado el 20 de Agosto de 2021, de The Taliban has taken lessons from the global jihadist movement: https://www.newstatesman.com/world/asia/2021/08/taliban-has-taken-lessons-global-jihadist-movement
Moritsugu, K. (22 de Agosto de 2021). Los Angeles Times. Recuperado el 6 de Septiembre de 2021, de Situación en AFganistán presenta desafíos para China: https://www.latimes.com/espanol/internacional/articulo/2021-08-22/situacion-en-afganistan-presenta-desafios-para-china
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