Nueva LOES por una educación democrática, de calidad y con presupuesto

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Luis Aguirre Autor

Secretario Relaciones Internacionales FEUE NACIONAL

Ex Secretario Ejecutivo OCLAE

Expresidente FEUE NACIONAL

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Palabras claves: democracia, calidad, autonomía, libre ingreso, presupuesto, movilización.

Hace más de 14 años se aprobó a través del Ministerio de Ley, la actual Ley Orgánica de Educación Superior LOES por parte del Gobierno de Correa. Así como en el resto de las leyes aprobadas durante el correismo, se anunció con bombos y platillos que la LOES se convertiría en el elemento necesario para cambiar la educación y garantizar una calidad en el proceso de enseñanza.

El modelo educativo impuesto por el correismo buscaba la construcción de una universidad elitista, retardataria y antidemocrática, que resultaba ser la copia y calca de varios modelos educativos que, aplicados en algunos países se demostró con el tiempo su fracaso. La actual LOES no se sintonizó con la realidad educativa ecuatoriana y desde su inicio generó el rechazo masivo de la comunidad universitaria, tanto de docentes, trabajadores, empleados y sobre todo de estudiantes, que movilizados en las calles señalaron la pérdida de derechos y principios de la universidad pública.

Este modelo gerencial de educación eliminó y redujo los derechos que fueron conquistados a través de luchas históricas del movimiento universitario, poniendo por delante la cacareada “Meritocracia”. Buscaron desmovilizar a la universidad pública con el objetivo de esconder los actos de corrupción, la venta del país a las transnacionales y a los países imperialistas, los negociados con las instituciones públicas, y poner al servicio del gobierno y de su partido político a la universidad ecuatoriana.

Se impuso un organismo que intentó someter a la universidad a través de las intervenciones, de las sanciones, de las acreditaciones y del presupuesto para su desarrollo. La SENESCYT se convirtió en la “Santa Inquisición” de la educación superior, comandada y auspiciada desde Carondelet.

Con la LOES correista se afectó el ingreso a la universidad dejando a más de 1,500.000 jóvenes sin universidad; con el pretexto de que solo los mejores deben entrar a la universidad, se distorsionó la educación, poniéndola como un servicio y no como un derecho, hemos pasado más de 8 años de la aplicación del SNNA, el ENES y todas sus variantes, y dentro de la universidad no existe una educación de calidad, el mito de la meritocracia se cayó por su propio peso.

El cogobierno, la elección de autoridades por parte de la comunidad universitaria, el libre ingreso, las intervenciones universitarias, las acreditaciones, el manejo del presupuesto fueron elementos golpeados drásticamente por el correismo, que además implementó una política de persecución hacia el movimiento universitario, con dirigentes estudiantiles sancionados, expulsados, sumariados, con juicios penales y con la cárcel.

Es por estos elementos que, desde el movimiento estudiantil y su gremio histórico en conjunto con los gremios nacionales de docentes, trabajadores y empleados se presentó el proyecto de Nueva LOES, que se suma a los cuatro proyectos de reformas presentados por la FEUE Nacional ante las autoridades de la Asamblea nacional. En esta ocasión, se logró incorporar firmas de 28 asambleístas que respaldan la necesidad de contar con una nueva LOES que garantice una educación democrática, de calidad, con presupuesto, y que se vincule a las necesidades y demandas de la sociedad.

Fruto de la movilización permanente durante la aplicación de la LOES correista, se logró abrir el debate en la sociedad sobre la educación superior, el ingreso a la universidad, el presupuesto, y se han conseguido algunas reformas a la actual LOES. El gobierno actual ha planteado un proceso de reformas parciales, desde la FEUE Nacional se exije una nueva LOES, para recuperar derechos eliminados y reducidos por el correismo, para garantizar el presupuesto recortado por el morenismo (herencia correista), y para conquistar nuevos derechos.

Queremos una universidad democrática que permita elegir a nuestras autoridades, que recupere la autonomía para conducir la universidad sin los designios de ningún gobierno y sin intervenciones, que garantice el cogobierno estudiantil paritario y se pueda elegir en conjunto a las autoridades, una educación de puertas abiertas donde ingresen todas y todos los jóvenes sin restricciones, para aportar de esa manera en la formación de profesionales y por ende en el desarrollo de la sociedad, una educación de calidad con profesionales altamente calificados, visionarios y críticos, que aporten en la construcción de políticas claras y se conviertan en referentes de la sociedad.

Hay que exigir presupuesto para la construcción de universidades en las ciudades y provincias que se necesiten, con nueva infraestructura para abastecer la demanda interna y externa, así como el empuje de la ciencia, la investigación y el desarrollo de tecnología vinculada a resolver las demandas de los sectores populares, con nuevos laboratorios y readecuación de los que ya se tienen, una universidad desburocratizada, que elimine los trámites innecesarios, que ponga en el centro del proceso educativo a los estudiantes como elemento esencial de la universidad, esto es lo que busca el proyecto de nueva LOES presentado a las autoridades de la Asamblea Nacional.

El gobierno de Guillermo Lasso debe recoger las visiones de la comunidad universitaria. Para la construcción de una nueva LOES se debe incorporar a todos los actores y no solamente a las principales autoridades, es necesario romper con el modelo educativo elitista, antidemocrático y retardatario que actualmente está vigente, de la misma manera, la Asamblea Nacional tiene la obligación de recoger la visión del movimiento universitario que unificado aporta con un proyecto de nueva LOES.

A pesar de que los gremios nacionales presentan un proyecto de nueva LOES a las autoridades de la Asamblea Naciona, y que cuenta con el respaldo de algunos asambleístas, la lucha por una educación superior democrática, de calidad y con presupuesto, se debe desarrollar con propuesta y en las calles, que ha sido el escenario natural de organización del movimiento universitario desde sus orígenes.

Frente a los distintos anuncios por parte del gobierno nacional, el movimiento universitario y en especial los estudiantes debemos estar atentos a cualquier atentado de violentar la universidad pública, el llamado a la unidad de los distintos movimientos y organizaciones estudiantiles debe prevalecer para juntos conquistar la Universidad que necesita el país y la Universidad que los jóvenes merecen.

Calidad, calidad, calidad, calidad, calidad

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